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Últimamente oigo muchos casos de futuras mamás que plantean una mudanza durante el embarazo y algunos de ellos incluso mudanza de las buenas, las que implican obras, amueblar una casa de cero, cambio rotundo de vida. No es algo para tomar a la ligera, hoy intento explicarte por qué y darte algunos consejos.
La mudanza durante el embarazo
Es cierto que si llegamos al momento de tener que necesitar un cambio de hogar, mejor ahora que somos dos que cuando seamos tres. Se multiplica todo aquello que debemos mudar y minimiza nuestro tiempo disponible. En ese sentido para muchas parejas puede ser una solución utilizar el embarazo para esta tarea. Pero siendo realistas lo ideal sería hacerlo antes del embarazo.
Una buena planificación nos haría acomodarnos en la nueva casa, escoger, reformar si es necesario, diseñar en función al futuro y a partir de allí ir en la búsqueda del positivo. Pero como no todo sale de forma ideal y no todo tiene que ser planeado para todos, es normal encontrarnos con parejas que tienen que dar el salto durante el embarazo.
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Lo primero que digo realmente y siendo totalmente sincera es “ufffff”. Ufff no significa “qué mal”, ufff significa “debes trabajar mucho tu bienestar para que esta circunstancia no sea muy difícil de sobrellevar”. Por supuesto que hay mucho que podemos hacer para que esto no afecte a tu embarazo pero es en esta circunstancia más que nunca donde todo el resto tiene que estar muy muy bien “atado” para que el estrés de una mudanza, el agobio de tiempos que se retrasan, los trámites y gestiones que significa un cambio de vida, no puedan contigo en una situación de vulnerabilidad mayor que en cualquier otro momento.
No siempre es igual, no es lo mismo planear una mudanza para el primer trimestre y una vez instalados planificar la llegada del bebé que tener que comprar las necesidades del bebé cuando no sabemos ni dónde vamos a vivir. Si tuviéramos la posibilidad, siempre será mejor hacerlo al principio. Aunque el segundo trimestre sea físicamente el mejor para enfrentar la mudanza, es necesario ya comenzar a pensar en la habitación, en los muebles, en todas las necesidades y por eso idealmente ya deberías estar acomodada para la semana 20 a 24. Quizás si logras mudarte entre la 16 y la 20 es el momento perfecto.
Si la mudanza es más allá de la semana 25 se complica un poco más y es cuando más deberías trabajar todos los otros aspectos de la planificación y tu estabilidad emocional.
¿Qué puedes hacer en este caso?
Es muy difícil hablar desde lo general pero voy a intentar brindar algunos consejos que pueden servir en todos los casos.
* Pide ayuda práctica: Trabajas, estás embarazada, y debes mudarte, no tienes que poder con todo. Es el momento más idóneo para pedir ayuda ¿qué tipo de ayuda?, toda la que puedas. Sería bueno por ejemplo que planees ayuda extra en casa, es decir alguien que se ocupe de la limpieza, la ropa o la comida de tu casa actual. Si estarás más ocupada sería normal que no puedas estar disponible para tus quehaceres normales así que pide ayuda para no estresarte.
* Planifica la llegada de tu bebé con tiempo y con ayuda: Siempre es buen ser planificado, conocer todas las opciones, estar preparado, pero en una circunstancia donde hay falta de tiempo, menos energía para poner, más incertidumbres es aún más importante. Yo puedo ayudarte muchísimo a que planifiques la llegada de tu bebé con eficiencia y pensando incluso en tu nuevo hogar.
*Plantea una mudanza en la que estés lo menos involucrada posible: Partimos de la base de que siempre hacemos más de lo que nos proponemos, así que o contrata o consigue personas que puedan incluso embalarte y prepararte las cajas para la mudanza, luego estarás presente y siempre terminarás haciendo más pero si planeas hacerlo tú te cargarás demasiado y será muy frustrante cuando te des cuenta que tu cuerpo dice basta y tienes que seguir.
* Ármate emocionalmente lo más posible: El paso a la maternidad, las hormonas, el miedo al parto o a que salga todo bien, ya son circunstancias con las que vivirás necesariamente pero deberás poder encontrar tu espacio para hablar, conocer, compartir, prepararte. La mudanza te sumará estrés, nervios, ansiedad, y es por eso que trabajar internamente el aspecto emocional es más importante en tu situación que en la de cualquier otra primeriza. Como BabyPLanner intento hacer mucho hincapié en esto cuando estoy con una mamá que vive una mudanza durante el embarazo, pienso que es de lo más importante que debemos hacer para que esté bien.
* Cuida tu bienestar: Es un momento de mucho estrés y ansiedad que no siempre será fácil. Debes invertir en ti, en cuidar tu cuerpo y tu bienestar emocional porque no querrás el día de mañana recordar tu primer embarazo como una etapa difícil o negativa. Si te toca la circunstancia de vivir una mudanza importante durante el embarazo debes hacer todo lo que esté a tu alcance para cuidarte y disfrutar de este momento.